lunes, 6 de abril de 2009

El Centro Cultural Conde Duque de la capital expone desde hoy y hasta el 3 de mayo el ambiente electoral de abril de 1979.

"Toma parte y vota", "Por una ciudad alegre" o "No dejes que las inmobiliarias decidan el futuro" son algunos de los lemas de las primeras elecciones municipales democráticas tras la dictadura, cuyo ha espíritu han recogido en una exposición la Fundación Pablo Iglesias y el Ayuntamiento de Madrid.

El Centro Cultural Conde Duque de la capital expone desde hoy y hasta el 3 de mayo los carteles, los panfletos y, en definitiva, el ambiente de la campaña electoral de abril de 1979, que empapeló España de colores y de mensajes plurales tras cuarenta años de Franquismo.

En ella puede verse como el PSOE pedía el voto para el profesor Enrique Tierno Galván, su candidato en Madrid, con los colores del arco iris y dos palabras que se repiten sin cesar en las octavillas que se repartieron hace ahora tres décadas: "Honradez y trabajo".

La campaña de Tierno, que le convirtió en el primer alcalde del Madrid democrático gracias a un pacto con el Partido Comunista que sellaron Santiago Carrillo y Alfonso Guerra, fue todo un alarde de ingenio y originalidad, que queda plasmado en una brillante viñeta titulada "Madrid tendrá un buen gobierno eligiendo de alcalde a Tierno".

Por su parte, el Partido Comunista de España (PCE), cuya lista encabezó Ramón Tamames, mostraba en sus carteles los dibujos de quince activos operarios trabajando sobre las letras "Entra en el Ayuntamiento".

"Tamames, un alcalde dinámico" o "Quita un cacique, elige un alcalde" son otros de los lemas utilizados por el PCE en Madrid, una de cuyas concejalas de entonces, Isabel Vilallonga -hoy edil del PSOE en el Consistorio- recuerda que aquellas elecciones "fueron las que de verdad dieron paso a la democracia en España".

La Unión del Centro Democrático (UCD) tampoco escatimó esfuerzos en pedir el voto para su candidato José Luis Álvarez, "Un alcalde para un Madrid mejor", que lideró la lista más votada en la capital, con 634.925 votos (40,28%), seguida por el PSOE, 622.971 (39,47%) y el PCE, con 231.268 (14,69%).

El candidato socialista en Barcelona, Narcis Serra, prometía "Un ayuntamiento de eficacia y cuentas claras", Santiago Carrillo clamaba "Ayuntamientos democráticos por fin" en carteles por toda España, al tiempo que el Gobierno de la UCD animaba a los españoles a "tomar parte y votar" alegando: "Los problemas del Ayuntamiento son tus problemas. Elige a los mejores".
Pero no sólo el ambiente festivo impregnó aquellas primeras elecciones municipales tras el Franquismo: 123 muertos en atentados y 10 manifestantes fallecidos ese año hicieron que las primeras corporaciones democráticas nacieran también en un contexto "de permanente riesgo de involución y golpismo", recuerda Ramón Adell, director de la exposición.

Este ambiente no impidió, sin embargo, que dos partidos de izquierdas, PSOE y PCE, accedieran por primera vez a la gestión de las instituciones tras la dictadura, y a que sus pactos les llevasen a gobernar en la mayoría de grandes y medianas ciudades, como Barcelona, Valencia, Zaragoza, Alicante o Málaga, en estas elecciones históricas en las que participó el 64 por ciento del censo.
El más ilustre alcalde socialista de 1979, Tierno Galván, tomó posesión de su cargo el 19 de abril en la Casa de la Villa y comenzó su discurso clamando con rotundidad: "Mañana mismo comienza la convivencia".

1 comentario:

Venta de campo en la Argentina dijo...

muy buen sitio… saludos a todos