La exposición "El trazo español en el British Museum. Dibujos del Renacimiento a Goya" en el Museo del Prado comienza con los ejemplares más antiguos que
corresponden a artistas del siglo XVI y que desarrollaron su actividad en
Castilla, como Alonso Berruguete. Asimismo, esta primera sección explora la
repercusión que tuvo para el dibujo español la participación de artistas
extranjeros, principalmente italianos, en la decoración del Monasterio de El Escorial.
Tal es el caso de Pellegrino Tibaldi del que se incluye uno de los dibujos con
arquitectura más sobresalientes del siglo XVI, el Estudio para la decoración de
la Biblioteca del Escorial.
Continúa con la obra de algunos de los pintores más importantes
del siglo XVII que trabajaban en distintas regiones del país, las cuales
actuaban como ‘centros’ artísticos independientes. Así, Vicente Carducho,
Alonso Cano y Francisco Rizi lo hacían en Madrid; Francisco Pacheco, Murillo y
Zurbarán, en Sevilla; Juan Ribalta en Valencia o José de Ribera, en Nápoles.
Todos ellos fueron representantes del florecimiento del dibujo durante el Siglo
de Oro y produjeron ejemplos excepcionales como El enano Miguelito de Rizi, San
Miguel Arcángel de Murillo, Curación milagrosa de un santo atribuido a Ribalta
o Ticio (o Prometeo) de Ribera.
Al llegar al siglo XVIII, la exposición incluye obras clave
de Luis Paret como Baile de máscaras en el Teatro del Príncipe; de José
Camarón, Mujer oriental bajo un toldo; y otros maestros del periodo, que
demostraron el considerable aumento del uso del dibujo en respuesta a las
tendencias e influencias internacionales.
La muestra finaliza con la obra de Francisco de Goya, que
cambiaría para siempre el panorama del arte español al ayudar a convertir
España en una fuerza artística dominante. A través de sus dibujos exploró lo
fantástico, las creencias y las conductas humanas. Ocho dibujos del maestro
aragonés –correspondientes a toda su carrera y nunca vistos en conjunto en
España-, entre ellos el magnífico Arthur Wellesley, primer duque de Wellington,
ponen de manifiesto la incomparable versatilidad de sus recursos gráficos y la
variedad de los temas que captaron su atención.